ENCAJE EN LA HISTORIA

Si hablamos de encajes, lo primero que me viene a la cabeza es el que vemos en la parte superior, Audrey Hepburn, en la película, "cómo robar un millón..."
Sutil, elegante, y desde luego inolvidable.

Pero el encaje tiene mucha historia, en el siglo XVI, el encaje de bolillos, hecho a mano con bobinas y alfileres, era un adorno habitual, y países como Francia, Bélgica e Italia se identificaban con el de la mejor calidad.
Sin Embargo, hacia 1840 se empezó a mecanizar el proceso, y ése es el tipo de encaje que podemos ver en la actualidad. El encaje ha ido adquiriendo connotaciones culturales: el blanco significa pureza, el rojo evoca lo provocativo y el negro sugiere luto o sufrimiento.

Valentino es famoso por crear prendas con telas de lujo que destilan una feminidad elegante.
Y lo podemos comprobar en las siguientes fotografías.



Pero nunca olvidemos aquellos encajes de seda de 1820, conocido también como encaje rubio, este encaje hecho con hilo de seda de colores naturales era un adorno de lujo ideal para decorar trajes de noche. Su brillo sutil combinado con la delicadeza del tejido y el bordado de metal debían deslumbrar a la luz de las velas en aquella época... Os enseño una fotofrafía que he encontrado y se aproxima mucho a esa época.

Y ahora se me ocurre una pregunta, tu eres de rojo, blanco o negro?

Sólo una recomendación, cuando lleves un vestido de encaje, y quieras llevar un tocado, elige algo muy discreto, no debes ir recargada. No olvidemos que la sencillez es elegancia.

Quizás os sorprendamos en breve en www.plumaazul.com